HONGOS
Los ¨Niños Santos¨ tienen la misión de experimentar el espíritu a un nivel muy profundo y a conectarnos con él ser. También nos hace muy conscientes de la realidad y resulta una herramienta valiosa en la sanación de nuestro cuerpo, mente y espíritu.
Los pueblos antiguos consideran a los Hongos como los hijos divinos de dios y la medicina más antigua del universo; constituye el fundamento del chamanismo, de la medicina natural y de la cosmovisión indígena mexicana.
La humanidad desde civilizaciones muy antiguas tiene un vínculo muy fuerte con los Hongos ya que han sido utilizados como parte reveladora de ritos y costumbres; en el México prehispánico solo los emperadores tlatoanis, guerreros o sacerdotes podían consumir estos Hongos, con los cuales tenían la conciencia de la conexión a la divinidad que creaban los Hongos y la conciencia de que no solo somos materia.
El teonanácatl es el Hongo sagrado para los antiguos aztecas; teonanacatl, cuya etimología proviene de las voces teotl, “dios”, y nanacatl, de nacatl, “alimento”, es un Hongo sagrado, es parte de los Hongos psilocibios de México, conocido desde los tiempos previos a la conquista.
Aunque en México existen 24 variedades de Hongos, se les suele llamar Niños Santos, Pajarito, Niño de las aguas, Hongo de la corona de cristo, San Isidro, etc., todos con efectos según la carga de alcaloides derivados de triptaminas, psilocibina y psilocina.
Algunos como el "Hongo de la corona de cristo" y el "Pajarito" eran utilizados para invocar a los dioses, platicar con los difuntos o predecir el futuro. El conocido como "Niño de las aguas" tenía efectos meramente alucinógenos.
La psilocibina es un compuesto psicoactivo presente en las setas y puede servir para tratar a la proporción de pacientes en los que fracasan las terapias convencionales para la depresión. Los Hongos reinician la actividad cerebral y mejoran los síntomas incluso después de varias semanas.
Las ondas cerebrales antes y después del tratamiento producen cambios en la actividad nerviosa asociados a la reducción duradera de los síntomas, incluyendo una reducción del flujo sanguíneo en la amígdala, (región cerebral involucrada en la ansiedad y el estrés).
Varios de los pacientes describieron la mejora de sus síntomas, afirmando que su cerebro había experimentado una desfragmentación o una reprogramación; la posibilidad de que la psilocibina proporcione el estímulo necesario para salir del estado depresivo.
MEDICINA
Nuestro primer contacto con los Hongos, demanda curarnos. Demanda superar nuestras dolencias físicas y mentales; es la medicina para el cuerpo, la mente y el espíritu por excelencia. Es una purga sagrada, y produce una limpieza profunda de todos nuestros órganos y revitalización de los mismos.
DESARROLLO PERSONAL
Por revelaciones o despertar de la consciencia durante el trance con los Hongos, o en los siguientes días, semanas o meses, la consciencia va creciendo, madurando, desarrollándose, y se va concretando un auténtico desarrollo personal en todos los aspectos, esto es, en el plano emocional, conyugal, familiar, social, laboral, espiritual-místico-personal. Esta práctica y/o aprendizaje llevan a descubrir el pleno sentido de la existencia personal.
MÍSTICA
El desarrollo o crecimiento personal que se va logrando, constituye la manifestación más auténtica de nuestra mística personal. La vida con más sentido y plenitud que uno va logrando, es el desarrollo de nuestra mística personal. Sin dogmas cegadores, sin oscurantismos perturbadores, sin rigideces enfermizas o fanáticas.
Esta madurez espiritual implica tranquilidad, equilibrio, cautela, sensatez, humildad, tolerancia y amplia sabiduría. Dios está en uno mismo; nuestra práctica mística, es el verdadero contacto.
Tomar Hongos no solo es tomar un brebaje y ya; es tomarte a ti mismo, tomar la verdad que está dentro de ti. No estás tomando la verdad de otra persona, ni de un gurú, ni de un chamán, ni de una cultura, estás tomando un vaso de ti; cuando te tomas a través de ellos, te verás como nunca te has visto antes.
Una puerta de acceso a estados modificados de consciencia, permitiéndonos observar realidades que serían ocultas en circunstancias ordinarias. Esta situación nos da entendimiento para reconciliarnos con la vida, con los demás, con la naturaleza, el universo, con nosotros mismos y con lo divino.
Esta contribución es fundamental para una modificación de la conciencia que merece especial y seria consideración porque permite al experimentador sentir y repensar con respecto a sus límites e infinitas posibilidades enérgico-espirituales.